¿Aumentará el polvo en las dependencias municipales?

La limpieza ya no es cuestión de tiempo en los edificios municipales, el síndrome de diógenes parece haberse apoderado del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Jumilla, que quiere guardarlo todo, cerrarlo todo y apagarlo todo. Con este síndrome en la cabeza han elaborado el último pliego de condiciones para la prestación del servicio de limpieza en los edificios municipales, al cual se tiene previsto destinar anualmente, más de 400.000 Euros de los contribuyentes.

Sin embargo, en este pliego, no figura ninguna cláusula que obligue a la empresa adjudicataria, a prestar un determinado numero de horas en la ejecución de la limpieza de los veintinueve edificios municipales incluidos en el catálogo. Podríamos pensar que se trata de un lapsus, pero fácilmente se puede comprobar que no es así, pues en **el primer pliego** elaborado en Febrero, se exigía a la empresa el empleo de más de 39.000 horas de trabajo por parte del personal cualificado, hasta ahora, limpiadoras Jumillanas en su mayoría; sin embargo, en este **segundo pliego** ya no se solicita este requisito, habiendo procedido a  retirarlo literalmente del pliego.

Me preocupa, y mucho, esta forma de privatizar servicios, donde se mantiene a favor de la empresa adjudicataria el beneficio integro de la cantidad presupuestada en la primera opción y se la exime totalmente, del compromiso en el número de las horas de trabajo por la prestación del servicio. Dando la impresión a los ciudadanos, que nuestros gobernantes no saben contratar y se amilanan a las primeras de cambio. Pero si preocupación me causa este grave hecho, mucha más preocupación me ocasiona que se haya hecho el pliego a medida de una empresa de las denominadas "grandes" por la envergadura del presupuesto, dejando  así fuera de posibilidades de contratación, a tantas empresas de limpieza "pequeñas" con las que contamos en nuestro municipio y que de tantos apuros están sacando a nuestros vecinos.

De ahí, la afirmación con la que inicio este articulo y que me lleva a pensar que la limpieza del gobierno de Jumilla, ya no es cuestión de tiempo, sino sólo cuestión de dinero. Y entonces, me viene a la memoria aquel hecho en el que una joven pareja decidida a contraer matrimonio, se acercó a la iglesia a preguntar por cuanto les saldría el casamiento, ante la contestación del párroco, el novio, que sólo quería salir del paso, se adelantó y dijo: "Señor cura, caseme usted hasta el duro".

C E R C A N Í A S... ALB-JUM-ALC (Breve comentario sobre cosas cercanas)